El sábado 30 de noviembre en la Puerta del Sol de Madrid un grupo de personas de distintas edades se reunieron con un objetivo: decir no a la esclavitud, denunciando una situación que afecta a miles de mujeres en nuestro país.
Organizado por la ONG Fiet Gratia, dedicada a la atención y ayuda a mujeres, cientos de personas se unían a la voz de “No está en venta” para reivindicar el fin de la esclavitud, la trata de personas y la explotación sexual.
Cristianos evangélicos de varios lugares del país se unieron al flashmob que sorprendió a los transeúntes. A lo largo de la jornada se desarrollaron actividades para concienciar a las personas del problema de la trata. Un escaparate de tres jóvenes representaba a mujeres maltratadas y esclavizadas. Hubo además una lectura de un manifiesto, grafitti, entrega de globos, y el recordatorio de estadísticas escalofriantes: 300.000 mujeres prostituídas en España de las cuales el 90% lo hace bajo coacción, según Trafficking in Person Report del 2013.
Organizado por la ONG Fiet Gratia, dedicada a la atención y ayuda a mujeres, cientos de personas se unían a la voz de “No está en venta” para reivindicar el fin de la esclavitud, la trata de personas y la explotación sexual.
Cristianos evangélicos de varios lugares del país se unieron al flashmob que sorprendió a los transeúntes. A lo largo de la jornada se desarrollaron actividades para concienciar a las personas del problema de la trata. Un escaparate de tres jóvenes representaba a mujeres maltratadas y esclavizadas. Hubo además una lectura de un manifiesto, grafitti, entrega de globos, y el recordatorio de estadísticas escalofriantes: 300.000 mujeres prostituídas en España de las cuales el 90% lo hace bajo coacción, según Trafficking in Person Report del 2013.
El flashmob se presentó con una canción con un mensaje muy claro. “Sueños rotos, libertad robada, atrapada en la noche de la trata y golpeada (…) un precioso ser, como tú y yo, una hija, una hermana, alguien (…) 27 millones, ¿es una broma? ¿Cómo hemos dejado que comenzase? (…) Después de que el hombre se fue, ella es nadie, ella está atrapada en la boca del infierno, ella está muerta desde dentro hacia fuera, su corazón está gritando pero el grito no se oye. ¿Quién será su voz?, ¿quién romperá la puerta abajo?, ¿quién la despertará de la pesadilla? (…) Tenemos que levantarnos, abrir nuestros ojos, ser su voz, ser su libertad, vamos!”.
La ONG Fiet Gratia, que organizaba el evento, es una de esas voces que quiere condenar esta situación y a la vez ofrecer ayuda a las víctimas. A través del trabajo de Project Rescue España, dirigido por Fiona Bellshaw, dentro de la misma ONG se está ofreciendo un hogar para aquellas mujeres que han sido vejadas, donde su integridad física, emocional y espiritual ha sido vulnerada. Se les ofrece un entorno seguro y apoyo integral para poder salir de esta situación.
La ONG Fiet Gratia, que organizaba el evento, es una de esas voces que quiere condenar esta situación y a la vez ofrecer ayuda a las víctimas. A través del trabajo de Project Rescue España, dirigido por Fiona Bellshaw, dentro de la misma ONG se está ofreciendo un hogar para aquellas mujeres que han sido vejadas, donde su integridad física, emocional y espiritual ha sido vulnerada. Se les ofrece un entorno seguro y apoyo integral para poder salir de esta situación.
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